DUELE AMAR

A veces tienes que llorar sin que las lágrimas mojen tu rostro, sufrir en silencio, a pesar del dolor, para poder vivir a través del amor, no a través de la tristeza como algunos pesimistas piensan. Y es que el amor no es tan sólo alegría: también duele amar.

EL AMOR ES UN DUENDE

Es cierto: es un duende travieso el amor. Llega sin anunciarse y nos ronda sin darnos cuenta. Sin darnos cuenta a veces ya estamos atrapados por él y no sabemos —no podemos explicarnos— el porqué  hacemos lo que hacemos por ese alguien que, sin percatarnos, ya está muy metido dentro de nosotros.

¿No será que el amor es un travieso  duende que juega con nosotros? No nos pide permiso para entrar  en nuestro corazón; tampoco para irse a otro lado  y dejarnos o vacíos o quizá enamorados de alguien  distinto que ha llegado a nuestra vida.

Sí, es cierto: es un duende travieso el amor.

EL CORAZÓN ES UN TIRANO

En el amor, el corazón es un tirano: él es quien elige, no uno. Podemos negociar con él usando la razón, pero no siempre nos escucha.

EL PODER DEL AMOR

Donde no pueden ni la inteligencia ni la fuerza ni el dinero, el amor sí puede. Y donde no habita el amor, difícilmente puedan habitar la comprensión, la tolerancia y el perdón. El amor sana.