20 años de sacerdocio presbiteral cumplo hoy.
A San Pablo Apóstol pido que crezca en nosotros la necesidad de conocer cada vez más y más a Jesucristo que nos amo y se entregó para tener vida al comulgar de su Cuerpo y Sangre.
A San Pedro Apóstol le pido en esta Santa Misa que crezcamos en el amor a la Iglesia y abandonemos los comentarios, compañias y acciones que nos alejan de la gracia de Dios.
Entré al Seminario porque no quería dedicarme a nada más que no fuese al estudio de la fe cuyo culmen es la Celebración Eucarística y la ayuda a los pobres.
Doy gracias a la Iglesia arquidiocesana peinada porque por ella tengo techo, comida, como subsistir y a las parroquias en que sus pastores me permiten servir con total valoración, consideración y respeto a mi persona y ministerio.
¡La Iglesia Católica ha de seguir adelante!

