Siempre hay temporadas que usted no olvida en un buen bateador y es por eso que están latentes en las mentes de los amantes del béisbol. Obviamente, es imposible por el espacio y el tiempo de recopilarlas todas, sin embargo, hacemos un ejercicio para presentarles temporadas memorables para un bateador.

Sin embargo, a pesar de ser campañas maravillosas, nuestros héroes no ganaron el premio Jugador Más Valioso por múltiples razones citadas, tales como:

1) La no realización de la premiación
2) Temporada mejor ponderada de otro jugador
3) Coincidir con una temporada fuera de serie de otro jugador

A continuación les presentamos una muestra, donde hay casos donde la razón no fue más que la no premiación, sin embargo, las mencionamos porque a la verdad, merecían un premio:

Babe Ruth, 1921, Yankees de Nueva York

Si hablamos de números, no podemos pasar por alto este jugador, quién para muchos ha sido lo mejor que ha visto el deporte del bate y la pelota.

En 1921, George Herman Ruth nos regaló una temporada que no tiene parámetros para ser medida.

Ruth bateó .378 de promedio, pero lo adornó con 119 extrabases, los cuales fueron 59 cuadrangulares, 16 triples y 44 dobles. Remolcó 168 vueltas, anotando 177 y conectando 204 hits.

The Babe logró tomar 145 boletos y sólo se ponchó en 81 ocasiones, con un OBP de .512, con .846 de SLG y .1,359 de OPS con 238 bases alcanzadas.

Ruth la puso muy difícil, pues en 1923 tuvo promedio de .393 y en 1927 conectó 60 jonrones, así que nos fue difícil elegir una campaña, pero nos quedamos con esta, para muchos la más completa, donde se estafó 17 bases además de sus números de poder.

Ponga esta campaña como una de las mejores vista en las Grandes Ligas. ¿Por qué no ganó el premio? Simplemente porque no se otorgó en ese año.

Rogers Hornsby, 1922, Cardenales de San Luis

Este beisbolista logró batear sobre .370 en 6 temporadas seguidas, pero sin duda logró poner su mejor campaña en 1922.

Batear 250 indiscutibles, 46 dobles, 42 HR, provocaron que «El Rajah» remolcara 152 vueltas con 141 anotadas y un promedio de .401. Su OBP fue de .459 con .722 de SLG y .1,181 de OPS.

Un bateador que logró batear 3 veces sobre 400 y que ganó 7 títulos de bateo, 6 de ellos seguidos, debe tener temporadas muy buenas en cada año, sin embargo, destacamos la de 1922, donde tampoco se entregó el premio MVP, pero el hombre fue Hornsby. ¿Por qué no ganó el premio? no se otorgó en ese año.

Hack Wilson, 1930, Cachorros de Chicago

Wilson remolcó 191 vueltas en 155 partidos y acumuló 97 extrabases distribuidos de la siguiente manera: 35 dobles, 6 triples y 56 jonrones.

Hack además anotó 146 vueltas y conectó 208 indiscutibles con 105 boletos recibidos y sólo 84 ponches, terminando con promedio de .356. Su OBP fue de .454 en esa temporada, liderando la liga con .723 de SLG y con un OPS de .1,177 y 423 en bases alcanzadas y aunque no lo crean, no tuvo la dicha de ser Jugador Más Valioso, ya que en ese año no se otorgó el premio, al igual que en 1922 y 1923, desde que se creó el galardón en 1911. El WAR de Hack Wilson en 1930 fue de 7.4.

Wilson terminó con una carrera extremadamente corta, con sólo 12 temporadas y 1,348 partidos, disputando 74 en 1934, su última temporada en MLB.

La adición al alcohol marcó la carrera del pequeño Wilson y murió de una hemorragia interna en 1948, no sin antes dejarnos una de las temporadas más excepcionales para jugador alguno.

¿Por qué no ganó el premio? Simplemente porque no se otorgó en ese año. Recordando que el premio de MVP fue inaugurado oficialmente en 1931, aunque date desde 1911.

Ted Williams, 1941, Medias Rojas de Boston

Un año fuera de serie para el béisbol, en donde Joe DiMaggio hila una racha de 56 partidos consecutivos bateando de hit, pero nada fue más impactante a nuestro parecer que lo que hizo con el madero Ted Williams.

Batear .406 de promedio, con 135 anotadas y 120 remolques en menos de 500 turnos, 37 cuadrangulares, 157 boletos, .553 de OBP, .735 de SLG y .1,287 de OPS son parte de los elogios que recibió Williams en una temporada inolvidable, donde ganaría su primer título de bateo, de 6 que colgaría en su carrera.

El jardinero izquierdo tuvo mejores números en carreras remolcadas, anotadas y cuadrangulares en otras temporadas, pero ese 406 de promedio nos dejó marcados con sólo 20 ponches. Sin duda, su carrera llena de temporadas inolvidables, pero elegimos esta de 1941, por ser esa que dejó un sello en la carrera de Teodoro Samuel Williams.

¿Por qué Williams no ganó el MVP? Los 56 partidos de DiMaggio son la razón.

Manny Ramírez, 1999, Indios de Cleveland

Una proeza del Súper Manny al remolcar 165 vueltas con promedio por encima de 300 (.333), más de 40 jonrones (44) y 131 anotadas.

Cleveland gana la División Central, el dominicano está en el Juego de Estrellas y gana el Bate de Plata, pero quedó de tercero en la votación para el premio de Jugador Más Valioso.

Los analistas pensaron que el puertorriqueño Iván Rodríguez merecía el premio, pero ¿tuvo Iván mejores números que Manny? ¿tuvo mayor impacto el ser receptor que remolcar 165 vueltas?

Manny lideró la liga en SLG con 663 y OBP con 1,154, también en bases alcanzadas con 174.

¿Cuáles fueron los argumentos? Que Manny en Cleveland tenía a Roberto Alomar, Jim Thome, Travis Fryman, Kenny Lofton, entre otros. Pero de igual manera señalamos que Rodríguez estuvo acompañado en Texas de jugadores como Rafael Palmeiro, Juan Gonzalez, Todd Zeile y Rusty Greer, en un listado donde 3 de los 4 mencionados remolcaron más de 100 y batearon .300 ó más, lo que demuestra que tuvo bastante ayuda ofensiva y ni hablar del pitcheo.

Aun así, el MVP no fue a las manos del Súper Manny.

Todd Helton, 2000, Rockies de Colorado

Una de las mejores temporadas para inicialista alguno en la historia de las mayores la tuvo Todd Helton al ganar el título de bateo (.372), liderato de dobles (59), más de 40 jonrones (42) y liderar la liga en remolques (147) y hits (216).

Lo mencionado da peso para ganar un premio y esta temporada debe estar subrayada como una de las mejores para pelotero alguno, agregando que tuvo 463 de OBP, 698 de SLG, 1,168 de OPS y 405 bases alcanzadas, todas estas tope en la Liga Nacional en el 2000.

Se ganó el derecho en el Juego de Estrellas y hasta en el Bate de Plata, pero ¿por qué no ganó el MVP?, se citan 2 razones principales:

1) Jugar en Colorado
2) Su equipo quedó en 4to puesto

Nos preguntamos porque no le dieron el Cy Young al dominicano Ubaldo Jiménez si lanzaba en Colorado en el 2010. Bueno, esto será siempre recordado como una de las mayores injusticias para muchos, ya que el premio fue ganado por el intermedista de los Gigantes de San Francisco, Jeff Kent, aunque tenía a Barry Bonds en su equipo, que de hecho quedó segundo en la votación. Más que eso, Helton quedó 5to en la votación, tirando por el piso e ignorando de manera absurda su gran temporada.

Sammy Sosa, 2001, Cachorros de Chicago

El Sammy nos puso a vibrar durante su carrera y tiene en su haber 3 temporadas de 60 ó más cuadrangulares y 4 seguidas de 50 ó más, sin embargo nos marca su temporada del 2001.

Sosa conecta 64 jonrones y remolca 160 carreras, anota 146 vueltas, liderando la Liga Nacional en ambos encasillados. Un promedio de .328 y .737 de SLG con .1,174 de OPS son números extraordinarios.

¿Por qué no fue MVP? pues la culpa la tiene un señor de nombre Barry Bonds, quién no se cansó de colgar premios y en el 2001 disparó 73 cuadrangulares y tomó 177 boletos, liderando la liga en OBP con .515, SLG de .863 y OPS de .1,379.

Albert Pujols, 2006, Cardenales de San Luis

Siempre hemos creído en la coherencia de los criterios y en el 2006, nuevamente consideramos que MLB cometió una injusticia al quitarle el MVP de la Liga Nacional al dominicano Albert Pujols.

Pujols logra 49 jonrones, 137 carreras impulsadas y ,331 de promedio. Lidera la Liga en SLG (.671) y OPS (.1,102) y un OPS ajustado de .178.

El inicialista lleva a San Luis a la postemporada, de hecho, aunque no tenga relevancia para el MVP, su equipo gana la Serie Mundial.

Albert es el Guante de Oro de la primera base en la Liga Nacional, exactamente la posición que juega el ganador del premio en esa temporada, el joven Ryan Howard, quién fuera de batear 58 cuadrangulares, muy buenos y remolcar 149 vueltas, queda por debajo de «La Máquina» en la mayoría de las estadísticas ofensivas y muy por debajo en la defensiva.

Sumenle a esto, que Howard se poncha en 181 ocasiones y Pujols se ponchó en 50. Ambos ganaron un premio de Jugador de la Semana en la temporada.

La contrariedad es tan grande que en el Juego de Estrellas de la temporada del 2006, Albert Pujols está como inicialista y Howard es parte de las reservas.

¿Cuáles son los argumentos para que Pujols no ganara el MVP? Pujols ganó un premio a jugador del mes y Howard lo ganó en los últimos dos meses.

Aun así, los Phillies se quedaron fuera del dinero, por lo que no hubo motivo ninguno, pues si bien es cierto que se debe a que Howard fue líder en carreras remolcadas y jonrones, entonces debería darle un premio a Todd Helton. Pero si es por la sabermetría, Pujols terminó con un WAR de 8.5 en el 2006 y Howard con 5.2.

Mookie Betts, 2016, Medias Rojas de Boston

 

Un joven campocorto, drafteado por Boston en la 5ta ronda del 2011, pone números anormales en la temporada del 2016, su 3era en MLB y 2da completa.

Termina con 122 anotadas, 31 jonrones, 42 dobles, 113 remolques, menos de 100 ponches y .318 de promedio. Gana Guante de Oro, Bate de Plata y es titular en el Juego de Estrellas. No se puede olvidar que Betts fue primer bate del equipo en la mayor parte de la temporada, aunque también bateó de tercero en el lineup, mostrándonos lo multifacético que es.

Su equipo gana la difícil División Este de la Liga Americana con récord de 93 victorias y 69 derrotas, y avanzan a postemporada.

¿No suena como MVP?, pues diríamos que suena, pero no lo es. A pesar de tener un WAR de 9.5, los que «votan», decidieron que Mike Trout fue el ganador, tomando en cuenta de que no ganó un Guante de Oro, ni pegó 30 jonrones, ni tuvo más vueltas remolcadas que Betts, y su equipo quedó en el 4to puesto del Oeste, sin avanzar a postemporada, pero fue el MVP, y de hecho su equipo no ganó 80 juegos, pero su «10.5» de WAR (sólo 1 más que Betts), opacó un avance a los playoffs, un Guante de Oro y múltiples estadísticas más.

¿Argumentos? Bueno, no hay muchos, pero el más racional es la libertad de expresión, donde cada cual vota por el que considere y la consideración ganó.

Alex Bregman, 2019, Astros de Houston

Batear 41 jonrones, .296 de promedio, nominado al Guante de Oro, más de 100 remolques y el mejor OPS de su carrera (.1,015), un Bate de Plata, no es garantía para un MVP, ni siquiera que tu equipo avance a postemporada con el mejor récord de MLB.

Todo esto le sucedió a Bregman en el 2019, cuando fue extremadamente valioso en la liga y hasta fue el antesalista en el lineup de la Liga Americana para el Juego de Estrellas.

Bregman fue segundo para la votación de MVP, con todo y su 6.8 de WAR y 986 de porcentaje de fildeo.

¿Quién fue el primero? Pues el mismo que en el 2014, 2016 y quien logró el tercero en el 2019. Jugando 134 partidos, contra 156 que jugó Alex Bregman, pero Trout le llevó 1.4 de WAR a Bregman (8.2) y aunque remolcó menos, anotó menos y bateó menos promedio.

Aunque su equipo no clasificó, bateó menos dobles, recibió menos boletos y no fue finalista en los premios defensivos, ganó el MVP.

Escrito por: Elwin Peña (Super Profe)