A Fray Antonio de Montesinos le llamamos el San Juan Bautista del tiempo de la conquista y colonia de nuestro continente.

Hoy día a Jesús lo encontramos en la ayuda a los ciegos, a los inválidos,
los leprosos, los sordos, en la cristiana sepultura y oración por
los muertos en y los pobres que necesitan los más elemental para sobrevivir y no lo tienen, así creerán en nuestro Señor Jesucristo, en su Cuerpo y en su Sangre.

Esta es la verdadera religión. La busqueda de buenos momentos y vacaciones lejos de la propia localidad, el confort y las influencias dan a la religión un mal nombre, es escándalo para los no creyentes y aleja a las personas de buena voluntad.

¡Dichosos los que no se decepcionan del Señor del Adviento!.

Dijo al respecto San Juan de la Cruz, Presbítero y Doctor de la Iglesia:

“Por los placeres pasajeros se sufren grandes tormentos eternos”.

No gastemos en estas próximas Navidades tanto dinero en salidas, ropas, comidas, salones, regalos que otros no necesitan. El amor no se compra con obsequios ni con dinero.

«Si quieren llegar a poseer a Cristo, nunca lo busquen sin la Cruz… Quien no busca la cruz de Cristo, no busca la gloria de Cristo… A Dios le agrada más una obra, por pequeña que sea, hecha en secreto y sin querer ser conocida, que mil hechas con el deseo de que los hombres las conozcan”.

Dediquemos nuestro tiempo con la familia a llevar a asistencia a los viejitos solitarios y abandonados, a los que viven en condiciones deplorables un poco de alivio con otras de caridad y misericordia.

“La mosca que se posa sobre la miel no puede volar; el alma que se apega al gusto del placer se siente impedida en su libertad y contemplación…En el atardecer de esta vida, seremos juzgados según el amor».

El Gaudete es para brindar el auxilio espíritual a los enfermos y toda la ayuda que podamos a los necesitados. Es tiempo del Pan del Cielo.