El grupo Altice, controlado por el empresario franco-israelí Patrick Drahi, presionado por los inversores tras brutal descalabro en bolsa en las últimas semanas, estudia ceder varios activos, y en concreto su filial dominicana y la suiza Green.

Una fuente próxima a la operación en la República Dominicana citada hoy por «Les Echos» indicó que «la reflexión está en marcha» pero que «el proceso todavía no».

Entre los posibles interesados por ese negocio, que podría valer unos 2.000-2.500 millones de euros, están Millicom y Lilac (de Liberty Global), según el diario económico francés, que además reveló que Altice baraja deshacerse de sus actividades BtoB en Suiza, en referencia a la marca Green.

Altice había comprado en 2013 la filial que tenía en la República Dominicana Orange (3,4 millones de clientes) por 1.100 millones de euros y Tricom (800.000 clientes) por 300 millones suplementarios.

La fusión de ambas, que se concretó en su propia marca hace unos días, ha dado lugar al «número dos» del país caribeño, por detrás de Claro (del magnate mexicano Carlos Slim), con más de cinco millones de clientes.

La compañía de Patrick Drahi ha perdido en bolsa casi un 50 % de su valor en una veintena de días (ahora su valoración es inferior a los 11.000 millones de euros) tras presentar unos resultados recibidos como decepcionantes por el mercado.

Los reportes, publicados por Financial Times y Reuters, establecen que Drahi despidió al presidente ejecutivo, Michel Combes, y se comprometió la semana pasada a que el grupo se aleje de las adquisiciones para reducir la deuda. La empresa tampoco descarta vender su cartera de torres de telecomunicaciones, que le podrían generar alrededor de 4,000 millones de euros.

Los informes dan cuenta que el negocio de telecomunicaciones de Altice en República Dominicana generó 718 millones de euros en ingresos el año pasado, o el 3% del total del grupo. El precio representa un múltiplo de siete a ocho veces las ganancias anuales ajustadas antes de intereses, impuestos, depreciación y amortización (EBITDA), siendo es la filial más rentable, con un margen de EBITDA ajustado superior al 51% cuando su gran filial francesa SFR tiene un 34 %, dijeron las fuentes.

La venta del negocio de República Dominicana por sí sola podría no ser suficiente para aliviar las preocupaciones planteadas por la agencia de calificación crediticia Standard & Poor Global Ratings, que cambió su perspectiva de la deuda de Altice a negativa de estable el jueves 23 de noviembre.

La agencia de calificación S&P indicó ayer que podría bajarle la nota en 2018 si no hay una reacción. En sus perspectivas pesan, en particular los 51.000 millones de euros de deuda que arrastra.

Altice recibió una calificación de crédito B+ a largo plazo por parte de S&P, que está a cuatro niveles por debajo del grado de inversión.

“La perspectiva negativa refleja varios riesgos de ejecución que podrían evitar que el grupo mantenga su posición en el mercado coreano, reduciendo la deuda y restableciendo la confianza del mercado”, dijo S&P en un comunicado.

“Podríamos bajar la calificación en un escalón en el próximo año si la administración no logra restablecer las operaciones más sólidas en Francia, como lograr una mejor retención de clientes y reducir la rotación en la alta gerencia, o si no logra recortar la deuda absoluta (…)”, agregó.

Fuente: EFE