Haivanjoe NG Cortiñas.

Santo Domingo (D.N.), Republica Dominicana.- El fenómeno de que la gente tenga menos dinero en sus manos o en los bolsillos produce un efecto no deseado en la conducta, misma que dependerá del nivel de limitaciones, privaciones o expectativas de consumo. No es lo mismo tener menos dinero para una persona que piense comprar un carro, a una que le pase lo mismo, pero que espera tener dinero para comprar alimentos para la sobrevivencia. En la primera, lo más probable es que haga ajustes en torno al nivel de la gama del vehículo de motor, pero en la segunda, el ajuste implicará en comer menos y de inferior calidad y eso tiene una reacción conductual distinta.

Tener poco dinero significa mucho para el que vive en escasez permanente o recurrente. En opinión de los expertos en conducta, disponer de poco dinero en aquellos sectores sociales más vulnerables, los lleva a tener la visión de túnel, que se genera cuando la persona se ve obligada a concentrarse en accionar principalmente para subsistir, dejando de lado otras necesidades, que luego pueden agravarse.