El economista Haivanjoe NG Cortiñas, al examinar el mercado cambiario dominicano, consideró que el tipo de cambio, al menos para el corto plazo, mantendrá la estabilidad que ha alcanzado en los últimos años y que el único factor amenazante que potencialmente podría tener la cotización del dólar en el mercado local es el nuevo entorno internacional que se encuentra en desarrollo.

NG Cortiñas indicó que el mercado internacional de divisas entre diciembre 2016 y enero 2017 estuvo experimentando determinados niveles de inestabilidad, con movimientos zigzagueantes, por la falta de maduración en la definición del alcance de la política económica del nuevo Presidente de los Estados Unidos, Sr. Donald Trump.

Existen razones como para apreciar que las más recientes posturas de la Reserva Federal, de inducir a que la unidad monetaria norteamericana se aprecie, puedan chocar con el interés del gobierno de hacer depreciar el dólar; dilema que  podría llevar a las autoridades monetarias a asumir una posición más reactiva que proactiva, respecto a futuras determinaciones sobre la tasa de interés, enfatizó el economista.

NG Cortiñas señaló que en el plano local, las causales que podrían influir en la cotización del dólar norteamericano presentan un escenario más definido y favorable que el internacional, factor que ayuda a los agentes económicos y público en general poder asumir una postura previsible en el mercado cambiario spot dominicano.

Haivanjoe NG indicó que la inflación como variable incidental del tipo de cambio, cerró a diciembre de 2016 en 1.70%, por debajo de lo contemplado en la meta de inflación del programa monetario e inferior a la tasa registrada en 2015, que fue de 2.34%, razón que permite pensar que no hay presiones de depreciación sobre el peso.

El economista también ponderó que la balanza comercial, que a septiembre de 2016 registró un déficit de US$5,431 millones, es un factor incidental negativo para la estabilidad del tipo de cambio; sin embargo, como el balance está alineado al comportamiento histórico, no le agrega presión a la cotización del dólar en el mercado doméstico; aunque no deja de ser un desafío.

Con relación a las reservas internacionales neta, ascienden a US$6,046.7, ese activo líquido internacional del país permite respaldar 4.3 meses de importación, cuando en 2015 fue de 3.7 meses, esta evolución positiva le reduce presión a la demanda de dólar y a la tasa de cambio, afirmó NG Cortiñas.

El profesional de la economía señaló que la Base Monetaria Restringida (BMR) a diciembre de 2016 fue de RD$234,949 millones, un crecimiento de 6.9%, este comportamiento se alinea al crecimiento del PIB que alcanzó 6.6%; y en adición, la BMR no presenta desvío frente al aumento estimado en el programa monetario del año, razones que no contribuyen a generar presiones al tipo de cambio.

Haivanjoe NG Cortiñas manifestó además una ausencia de presiones sobre el tipo de cambio en el ámbito de la Tasa de Política Monetaria (TPM), dado que durante los diez primeros meses de 2016 se mantuvo inalterable en 5.0% y solo a partir del mes once se elevó a 5.5%, ajuste que obedeció a razones preventivas de carácter externo, dada el alza de la tasa de interés de la Reserva Federal de los Estados Unidos.

Como la TPM ha presentado una fuerte estabilidad, inducida por los logros alcanzados en materia de inflación, la tasa de interés promedio ponderado del sistema bancario nacional para 2016, tanto la activa, como la pasiva, registraron bajas, al pasar la primera de 15.35% a 13.83% y la segunda, de 7.25% a 6.31%, desempeño que muestra la confianza en la moneda nacional por parte del público  y la ausencia de presiones de depreciación pronunciada del peso.

NG Cortiñas indicó también que el nivel de las captaciones en moneda nacional pasó de 73.0% a 75.0% dentro del total ahorrado, una expresión de desdolarización del ahorro privado y en consecuencia una muestra de nula presión hacia el tipo de cambio nacional y confianza en el peso.

El economista dijo que las captaciones en dólares disminuyeron dentro del total ahorrado de 27.0% a 25.0% en 2016; siendo este indicador otra muestra de desdolarizacion del ahorro y disminución de la presión hacia la tasa de cambio, vía demanda de dólar.

En el ámbito fiscal su balance a noviembre de 2016 no presenta una situación distinta al de 2015, razón por la cual, y en adición al desempeño del resto de las variables económicas ya presentadas, no estaría presionando el tipo de cambio, como factor perturbador del mercado cambiario dominicano, afirmó NG Cortiñas.

Haivanjoe NG agregó en relación a las remesas, soporte importante en la oferta de dólares para la economía dominicana, en la dimensión del nulo esfuerzo que el país realiza para obtenerlas, alcanzará los US$5,100 millones a diciembre de 2016, superando el nivel de 2015, este crecimiento sirve de fondeo para suplir la demanda de dólares en el mercado spot, neutralizando así cualquier incremento de los requerimientos de la divisa.

El economista concluyó diciendo que dado el desempeño de cada una de las variables que sirven de causales o están asociadas al comportamiento del tipo de cambio, no existen razones materiales en la economía dominicana para estimar que el peso se deprecie más allá de lo contemplado en el presupuesto de la nación en términos de techo, que es un 4.0%; por lo que sugirió a los agentes económicos y público en general mantener la credibilidad en las políticas públicas fiscal y monetaria de 2017.