¿Qué se puede hacer si en Internet aparece información que alguien preferiría que se mantenga privada? ¿Qué hacer si se encuentra información que es vieja, inexacta o simplemente equivocada?

Si una persona es dueña de una propiedad en los EEUU o de una compañía en los EEUU (que a su vez puede ser dueña de una propiedad) es entendible que desee que eso no lo sepa el público en general. Vale aclarar que esto va más allá de que la propiedad la tenga o no declarada ante la administración tributaria que corresponda (naturalmente lo ideal es que la tenga declarada). Pero el punto tiene que ver con la privacidad de la información: por diferentes motivos, a la mayoría de la gente no le gusta que los demás se enteren de cuánto dinero tienen.

Uno de los principales problemas que encuentran los privados con respecto a páginas web como CorporationWiki, Bizapedia o el Inter Credit Report del estado de la Florida, es que aun habiendo actualizado la información para no aparecer en una simple búsqueda por Google, la información permanece desactualizada y nadie de estas páginas parece muy interesado en ponerla al día. ¿Hay solución para este tema? Depende del caso, ya que si bien existen algunos especialistas que pueden resolver estos temas puntuales, la implementación puede no ser perfecta.

Respecto de lo que se conoce como “Protección de Datos Personales”, hay en América Latina diferentes avances en Derecho Informático, aunque esta rama del derecho necesita de más años y más casos para establecer una jurisprudencia clara.

El problema de la privacidad se hace más difícil cuando hablamos de noticias o contenidos (fotos, videos) que aparecen en Internet. ¿Cómo hace un medio para saber si una noticia que está publicando es falsa o verídica? ¿Cómo hace un individuo para evitar que siga apareciendo su nombre en una búsqueda cuando la información que aparece es imprecisa, desactualizada o simplemente falsa?

Hace pocas semanas, Alemania anunció que multaría a determinadas compañías de Internet en EUR 50 millones por no retirar de sus publicaciones noticias falsas. ¿Es este el camino correcto?

Vint Cerf, veterano de Google y uno de los llamados “padres de Internet” cree que “cuando se comienza a exigir que existan mecanismos automáticos para suprimir información, uno empieza a recorrer el mismo camino de China. ¿Quién decide y con qué argumentos cuáles son los contenidos que deben ser suprimidos?”.

Hasta el momento la solución práctica parece la de combatir el problema con las mismas reglas de juego que lo originaron. Si hay un contenido no deseado que aparece con una simple búsqueda de Google u otro navegador, habrá que generar contenido nuevo y actual que sea indexado justamente por los navegadores, de modo de que el contenido no deseado aparezca en una posición rezagada de la búsqueda.

El camino de exigir que se quite o actualice un determinado contenido, suele no ser efectivo, salvo en casos particulares de determinados sitios web que tienen información a la que puede considerarse “Datos Personales”, como la titularidad de una propiedad o de una sociedad.

Conclusiones:

Cuando se trata de “Datos Personales”, hay caminos para exigir la remoción de ellos de Internet o de poner la información actualizada. No es siempre efectivo, pero puede lograrse.

Cuando se trata de información publicada por algún medio digital, en la Argentina la Corte Suprema de Justicia decidió que los buscadores de Internet se hallan protegidos por la libertad de expresión.

Referencia: Miguel Angel Boggiano