Por J. Miguel Santiago Colón

Aún falta por conocer la gravedad de los daños causados por el inmenso fuego en París

Una vez se controle el fuego que consumió hoy partes de la catedral de Notre Dame, en París, el camino para la restauración del edificio será uno largo, opinó el arquitecto Jorge Rigau.

Según el historiador, quien forma parte de un proyecto de restauración en la iglesia San José en el Viejo San Juan, habrá que esperar a que el incendio se controle para saber qué exactamente se puede recuperar de esta histórica obra.

“Hay reconstrucción y hay restauración. Queda ver qué exactamente queda luego. Con fotografías se podrá lograr restaurar algo, aunque sea parcial”,expresó Rigau en entrevista telefónica con El Nuevo Día.

Momentos después de que se reportara el incendio, la inmensa aguja de la iglesia católica colapsó. Pese a no conocer de inmediato el resultado directo del accidente, el experto en temas de restauración entiende que la pérdida no solo será física.

“El material (del edificio) se verá sufrido. Lo que no se cayó se verá al menos muy afectado. Con esto se pierde la visión completa de la obra. No es solo la cúpula que se cayó, es a lo que cayó encima”,comentó.

Esta estructura tiene alrededor de 800 años, desde el comienzo de su construcción en el siglo XII. El lugar también sobrevivió momentos de gran envergadura como la ocupación alemana de Francia durante la Segunda Guerra Mundial.

Aunque el secretario de Estado francés de Interior, Laurent Nuñez, afirmó que la salvación del monumento «no está asegurada», el gobierno mencionó luego que se mantenía optimista de que se pueda salvar.

Rigau enfatizó que probablemente surgirá alguna iniciativa internacional para preservarlo.

“No tengo duda de que habrá un esfuerzo internacional para su restauración. Los esfuerzos para mantener a esa iglesia tomaron muchos siglos”, dijo.

De hecho, la directora general de la Unesco, Audrey Azoulay, ofreció el apoyo de su institución para su restauración.

«La Unesco sigue de cerca la situación y está al lado de Francia para salvaguardar y rehabilitar este patrimonio inestimable», escribió en su cuenta de Twitter Azoulay, antigua ministra francesa de Cultura.

Notre Dame forma parte del Patrimonio de la Humanidad desde 1991.

«Como un personaje familiar»

Por su parte, la arquitecta Astrid Díaz destacó que “su destrucción es sentida como un personaje familiar. Cuando desaparecen nos damos cuenta de su inmenso valor en representar lo que es el ser humano, su cultura, arte, y su obra patrimonial”.

Al tiempo que recordó que en la isla se han tenido incendios que pudieron acabar con patrimonio puertorriqueño.

«Estuvimos muy cerca de perder la Casa-Hacienda Labadie en Moca, protagonista de la novela “La Llamarada” cuando en proceso de restauración ocurrió un fuego. Agraciadamente hoy se conserva como biblioteca cultural y podemos disfrutar su arquitectura de influencia francesa tipo castillo», precisó.

Díaz agregó el incidente del casco urbano de Ponce, que estuvo en peligro de consumirse por un gran fuego cuando sus bomberos héroes lo controlaron el 25 de enero de 1899.

Para la arquitecta, resulta increíble que en pleno siglo XXI con tanta tecnología y adelantos se haga tan complicado controlar fuegos de esta envergadura.

Fuente: El Nuevo Día