El accidente de un avión DC-9 de la estatal Compañía Dominicana de Aviación (CDA), ocurrido el 15 de febrero de 1970, se registra al día de hoy como la peor tragedia aeronáutica ocurrida en el territorio nacional, en donde perecieron los 97 pasajeros y 5 tripulantes que apenas tenían tres minutos que habían despegado del Aeropuerto Internacional de Las Américas.

Fué exactamente a las 6:30 p.m., a sólo 1.9 millas y tres minutos de haber despegado, cuando el avión McDonnell Douglas DC-9 serie-32 que se dirigía a San Juan, Puerto Rico, se precipitó a las aguas del Mar Caribe, falleciendo sus 102 ocupantes, hecho que enlutó a todo país. El DC-9 era un avión nuevo, con dos meses en servicio, sólo 350 horas de vuelo recorridas antes del accidente, estaba en servicio desde el 12 de diciembre de 1969, era el número 546 de 1,084 que habían sido construidos por el fabricante. Tenía capacidad para 107, configurados sólo en clase económica, y su costo fué de US$4.5 millones y US$880,000 en accesorios adquirido por CDA con un financiamiento del Exim Bank.

Luego del accidente, fué necesario esperar más de tres horas para que el lugar del accidente pudiera ser iluminado con luces de bengala emitidas por un avión que vino desde Puerto Rico, y el Club Náutico de Santo Domingo, de Andrés Boca Chica, se convirtió en el centro de operaciones rescate. Entre los pasajeros de la nave se encontraba el ex campeón mundial de boxeo Carlos Teo Cruz, su esposa Mildred , su hijo Carlitín de 7 años y su hija Herminia de cuatro años. El cadáver de Mildred y de la niña, fueron encontrados cuatro días después.

También viajaban Guarina Tesón de Imbert, esposa del general Antonio Imbert Barrera, su hija Leslie, y una hermana del general, Aida Imbert viuda Domínguez. Las mujeres Imbert iban a Puerto Rico a comprar el ajuar de bodas de Leslie, la cual se casaría con el joven Frank Rainieri. Viajaba también en el siniestrado avión, el destacado ajedrecista Hugo Mayer, de nacionalidad dominicana, pero quién residía en Puerto Rico. Su cadáver nunca apareció.

También murieron los integrantes del equipo olímpico de Puerto Rico, quienes estuvieron en el país en un intercambio con sus homólogos dominicanos con miras a la participación en los XI Juegos Deportivos Centroamericanos y del Caribe de Panamá 70. Ese equipo estaba integrado por las jugadoras Maritza Bernal, Rosa Bernal, Naida Cardona, Iris Rodríguez, Dolores Villegas, María de Lourdes Sánchez, Catalina Rodríguez, Hortensia Otero, Belinda Correa, Zoraida Figueroa, Rosa Rivera y Judith Peña, bajo la dirección del coach Juan Ramón Loubriel y Fernando Jiménez como asistente. Estuvieron acompañando la delegación Carmen Rodríguez, Víctor Rivera padre, Víctor Rivera hijo y la esposa Mercedes Martínez de Rivera; Marilyn Santerson, José Oriol Carrión padre y José Oriol Carrión hijo y Lucy Armaiz de Carrión; David Armaiz, German Otero padre y German Otero hijo; Basilisa Craterote de Sánchez y Virginia Vera de Bernal (la madre de las dos primeras

La tripulación de mando de la nave estaba integrada por los cubanos, capitán Eduardo Guillermo Tomeu y por el copiloto José Pepe Núñez, mientras que la tripulación de cabina la completaban Carlos Antonio Pepén, Deisy Peña y Sandra García.

Fuente: Bienvenido Pantaleón – Imágenes de nuestra historia